33 Simón por su parte hizo una expedición hasta Ascalón y las plazas
vecinas. Se volvió luego hacia Joppe y la tomó,
34 pues había oído que sus habitantes querían entregar aquella plaza
fuerte a los partidarios de Demetrio, y dejó en ella una guarnición
para
defenderla.
35 Jonatán, de vuelta, reunió la asamblea de los ancianos del pueblo,
y decidió con ellos edificar fortalezas en Judea,
36 dar mayor altura a las murallas de Jerusalén y levantar un alto
muro entre la Ciudadela y la ciudad para separarlas y para que quedara la
Ciudadela aislada y no pudieran comprar ni vender.
37 Se reunieron, pues, para reconstruir la ciudad, pues había caído un
trecho de la muralla que daba al torrente por la parte de levante; restauró
también el barrio llamado Cafenatá.
38 Por su lado, Simón reconstruyó Jadidá en la Tierra Baja, la
fortificó y la guarneció de puertas y cerrojos.
39 Trifón aspiraba a reinar en Asia, ceñirse la diadema y extender su
mano contra el rey Antíoco.
40 Temiendo que Jonatán se lo estorbara y le hiciera la guerra, trataba
de apoderarse de él y matarle. Se puso, pues, en marcha y llegó a Bet San.
41 Jonatán salió a su encuentro con 40.000 hombres escogidos para la
guerra y llegó a Bet San.
42 Vio Trifón que había venido con un ejército numeroso y temió
extender la mano contra él.
43 Le recibió con honores, le presentó a todos sus amigos, le hizo
regalos y dio orden a sus amigos y a sus tropas que le obedeciesen como a
él mismo.
44 Y dijo a Jonatán: «¿Por qué has fatigado a toda esta gente no
habiendo guerra entre nosotros?
45 Envíalos a sus casas, elige algunos hombres que te acompañen y
ven conmigo a Tolemaida. Te entregaré la ciudad, las demás fortalezas, el
resto de las fuerzas y a todos los funcionarios, y luego emprenderé
el
regreso pues para eso he venido.»
46 Le creyó Jonatán y obró como le decía: despachó sus tropas, que
partieron para el país de Judá,
47 y conservó consigo 3.000 hombres de los cuales dejó 2.000 en
Galilea y mil le acompañaron.
48 Pero apenas entró Jonatán en Tolemaida cuando los tolemaiditas
cerraron las puertas, le apresaron a él y pasaron a filo de espada a cuantos
con él habían entrado.
49 Envió Trifón tropas y caballería a Galilea y a la Gran Llanura para
acabar con todos los partidarios de Jonatán,
50 pero éstos, enterados de que él había sido apresado y muerto con
los que le acompañaban, se animaron unos a otros y avanzaron, cerradas
las filas, prontos para combatir.
51 Sus perseguidores, al ver que luchaban por su vida, se volvieron.
52 Aquéllos llegaron todos en paz al país de Judá, lloraron a Jonatán
y a sus compañeros y un gran temor se apoderó de ellos. Todo Israel hizo
un gran duelo.
53 Todos los gentiles circunvecinos trataban de aniquilarles: «No
tienen jefe - decían - ni quien les ayude. Esta es la ocasión de atacarles y
borrar su recuerdo de entre los hombres.»